En esta ocasión vamos a hablar de la función fundamental que debe cumplir un hostal: asegurar el bienestar del cliente, de aquel que nos confía algo tan preciado y reconfortante como un buen descanso.
Los hostales tenemos algunos trucos para garantizar el descanso y el silencio. Uno de ellos es alternar habitaciones vacías entre unos clientes y otros. De esta forma evitamos uno de los motivos que más quejas producen; los ruidos. Eso no es siempre posible, en ocasiones por petición propia de los clientes, al solicitar estar dos habitaciones juntas, o por razones de organización. El cliente también puede hacer mucho para facilitar su descanso y el de los demás visitantes. Ya sabemos aquello de “no hagas a nadie lo que no te gustaría te hicieran a ti“.
Conoce los mejores consejos para descansar en un hostal
Lo primero, facilítanos tus preferencias; la almohada es primordial, y cada uno tiene sus gustos. Hoy la mayoría de los hostales disponemos de varios tipos de almohada. Solicita una extra, más dura o blanda, y no te costará más.
La cama va unida a la almohada, es algo primordial. En los hostales tenemos un alto nivel de exigencia a nuestros proveedores y nos dejamos aconsejar por ellos en la búsqueda del mayor confort y calidad… Aun así, somos conscientes de que a todos los clientes no les puede gustar.
La calefacción: ajusta en torno a 26 grados en invierno y 22 en verano. Así colaboraremos con el medio ambiente, ya que la tecnología Inverter asegura un funcionamiento más adecuado. No dudes en solicitar en tu hostal más mantas en invierno, si las necesitas.
Y, a renglón seguido sobre que podemos hacer por la convivencia de todos, os aconsejaría regular el volumen del televisor, no hablar a voces, hacer un uso adecuado de la grifería del baño, no cerrar las puertas de golpe… Debemos recordar que estamos pared con pared, y es normal que los ruidos, si son bruscos, van a molestar y afectar al descanso de los demás.
Normas para una estancia sencilla, pero agradable.
